Las enseñanzas de la Biblia sobre la higiene
La principal enseñanza de la Biblia sobre la limpieza física aparece en Levítico 11-15. Algunas de las reglas nos pueden parecer extrañas y rígidas. Sin embargo, nuestro entendimiento moderno de la cantidad de enfermedades transmisibles muestra que otras reglas son también muy sensatas.
Leer Levítico 11:32-40, 13:29-59, 15:1-15
Se enfatiza a menudo la necesidad del aislamiento y el aseo. Incluso hoy puede que sea difícil distinguir entre los diferentes tipos de infección y puede que sea mejor no arriesgarse. La transmisión de enfermedades como el SIDA y la hepatitis a través de la sangre y otros fluidos del cuerpo muestran claramente la necesidad de cuidarse.
Leer Romanos 12:1
Pablo nos insta a que presentemos nuestros cuerpos como un sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. ¿Qué clase de cuerpos ofrecemos cuando vivimos para él? No siempre podemos evitar la enfermedad pero ¿estamos haciendo mejor uso de nuestro recursos, tanto física como espiritualmente? ¿Estamos poniendo a otros en peligro por nuestra propia falta de higiene? ¿Es ésta una actitud cristiana (Filipenses 2:4)?
Leer Mateo 23:25-28
Jesús criticó a los fariseos por estar limpios por fuera pero sucios por dentro. Les dijo que deberían estar limpios de adentro para afuera. ¿Nos habría dicho Jesús algo diferente a nosotros hoy en día?
Paul Dean es un Consultor en infraestructura rural e ingeniería civil, con considerable experiencia en Uganda, Bosnia y Pakistán.