Los niños juegan porque es divertido, pero el juego también es clave para su aprendizaje y desarrollo. El juego les ayuda a aprender nuevas destrezas, comunicarse, obtener confi anza, relacionarse con otras personas y descubrir cosas sobre ellos mismos y el mundo. Todos los niños y las niñas necesitan las mismas oportunidades para jugar e interactuar con los miembros de la familia y amigos. Una de las cosas más importantes que los adultos y niños mayores pueden hacer es escuchar y responder a los niños pequeños. Cuando hacemos esto bien, los niños aprenden que lo que ellos dicen y hacen es importante. Esto les permite sentirse bien consigo mismo y les da la confi anza para intentar cosas nuevas.
Cada niño es diferente y se desarrolla a un ritmo distinto. Los bebés que no han comido lo suficiente o han estado enfermos necesitan ayuda adicional. No deben excluirse a los niños con discapacidades. Puede que ellos necesiten apoyo y ánimo adicional para superar sus dificultades para moverse o escuchar o ver. Puede que ellos no hagan todas las cosas que los demás bebés y niños pequeños hacen a una edad similar pero aprenderán a hacer muchas cosas si se les ofrece el apoyo y la estimulación adecuadas.
Por lo general, a los niños mayores les gusta jugar con, y ayudar a los bebés y niños más pequeños. Ellos pueden ayudar a los niños pequeños a desarrollarse estando presentes para jugar con ellos, escuchándolos y dándoles apoyo cuando intentan nuevas actividades, y asegurando que estén a salvo. Los niños mayores pueden ayudar a hacer que las actividades cotidianas como ir al mercado, preparar los alimentos, sean divertidas e interesantes para los niños más pequeños.
Recordar: es importante no sobrecargar a los niños mayores con las responsabilidades de los adultos de cuidar a los bebés y niños pequeños. Los niños mayores también necesitan tiempo para jugar y no debe descuidarse su propio desarrollo.
Actividades para los bebés
Desde su nacimiento, los bebés deben ser estimulados y debe dárseles respuesta. Esto puede lograrse por medio del juego, compartiendo actividades y hablando, riendo y cantando juntos. Si un bebé hace un sonido o gesto, los niños mayores pueden repetirlo para el bebé. De esta manera es que los bebés aprenden a comunicarse. Las relaciones cálidas y amorosas son vitales para el desarrollo físico, social y emocional de un niño. Abrazar, mimar, sonreír y hablarle al bebé le ayuda a crecer y sentirse seguro. A continuación algunas sugerencias para juegos que los cuidadores o niños mayores pueden utilizar para jugar con bebés de hasta aproximadamente dos años de edad.
- Amarre o cuelgue objetos como cucharas cerca de donde esté acostado el bebé de manera que pueda alcanzarlos con las manos y sostenerlos.
- Diga el nombre del bebé o aplauda de manera que el bebé mire para ver de dónde proviene el sonido. Cántele, meza y muevalo al ritmo de una canción.
- Cargue al bebé y mencione los nombres de objetos. A pesar de que al principio el bebé no responda a este tipo de estímulo, es importante continuar hablándole y cantándole.
- Tan pronto como el bebé empieza a entender y usar el lenguaje le gusta jugar juegos usando palabras: ‘¿Dónde está mi nariz?’ o ‘Busquemos la taza’.
- Dele al bebé objetos suaves y anímelo a devolvérselos y a pasarlos de una mano a la otra. Debe asegurarse de que los objetos sean lo suficientemente grandes para evitar que el bebé se atragante.
- Realice juegos con los dedos de las manos y de los pies del bebé.
- Anímelo a aplaudir con las manos y a decir ‘adiós’ con las manos.
- Hágale una pelota suave para tirar.
- Dele dos objetos y tome usted otros dos objetos. Golpee un objeto contra el otro y vea si el bebé puede imitarlo.
- Dele una caja y cosas de distintos tamaños para meter y sacar de la caja.
- Esconda algo debajo de una taza o de un pedazo de tela mientras el bebé observa y vea si puede encontrarlo.
- Haga una muñeca con tela vieja, rellena con pedazos de tela o materiales plásticos para empacar, hierbas secas o papel. Asegúrese de coserla cuidadosamente. Cuéntele al niño historias sobre la muñeca.
- Dibuje en la arena o en el lodo con un palito o un dedo y observe si el bebé puede imitarlo.
- Muéstrele al bebé un animal o la imagen de un animal, haga el sonido que hace ese animal y anímelo a repetir los sonidos.
- Anímelo a comer por sí solo.
A medida que el bebé crece, realice juegos que le animen a gatear, pararse y caminar. Construya un juguete sobre ruedas que un niño que empieza a caminar pueda halar o empujar mientras camina. Puede construir un juguete para rodar con una lata redonda y alambre de una percha. Puede enhebrar carretes de hilo o carretes de película viejos rellenos con cosas que suenen para que el niño los arrastre. Las botellas plásticas o las latas de refrescos también ruedan bien. Debe asegurarse de que no tengan superficies puntiagudas. Si el bebé no puede moverse sin ayuda debido a una discapacidad, dos niños pueden ayudarlo a gatear con una tira de tela alrededor de su cintura y usándola para hacer que el bebé se sostenga sobre sus manos y rodillas. Otro niño puede animarlo a gatear tendiéndole un juguete o una fruta. Recuerde demostrarle al bebé que usted se siente complacido al ver que él intenta hacer y decir cosas nuevas. Elógielo con palabras y sonriendo, dándole palmaditas o abrazándolo.
Actividades para niños pequeños