¿qué podemos aprender de este pasaje?
Amnón abusó de su poder y su autoridad para conseguir lo que quería, a pesar del daño que le causó a Tamar.
El silencio de todos aquellos involucrados en esta historia es vergonzoso. En nuestra sociedad, los cristianos no deberían quedarse en silencio si saben que está ocurriendo un abuso, sea cual fuere el costo personal que pudieran sufrir.
El papel que Tamar cumplía en el hogar la hacía vulnerable: no podía negarse a servir o cocinar para este hombre. Los jóvenes, especialmente las jovencitas, son muy vulnerables a la violencia sexual. Debemos asegurarnos de que, desde una edad temprana, reciban educación acerca de los riesgos que corren, además de brindarles una protección efectiva en nuestras propias familias y comunidades.
La violencia sexual puede ocurrir en cualquier lugar, incluso en hogares cristianos y en iglesias (David era un hombre de Dios y, sin embargo, en su propio hogar ocurrió un acto de violencia sexual). Es importante generar una mayor conciencia de que los sobrevivientes NO tienen la culpa de haber sufrido violencia.
Motivos de oración
Orar por la sanidad del dolor y el sufrimiento (físico, mental y emocional) causado por la violencia sexual.
Orar por protección para las jóvenes que, como Tamar, son vulnerables a la violencia sexual.
Orar por mujeres y hombres piadosos y compasivos que se manifiesten en contra de la violencia sexual y procuren proteger a los más vulnerables.
Adaptado de Hand in hand: Bible studies to transform our response to sexual violence [Hombro a hombro: estudios bíblicos para transformar nuestra respuesta a la violencia sexual].
Hand in hand: Bible studies to transform our response to sexual violence [Hombro a hombro: estudios bíblicos para transformar nuestra respuesta a la violencia sexual].
Serie de doce estudios bíblicos sobre violencia sexual, disponible en francés, inglés y portugués. Comuníquese con nosotros si desea pedir una copia impresa a GBP 6 o descargue una copia gratuita en el siguiente enlace: www.tearfund.org/sexualviolence.
Problema espinoso
Pregunta: Yo dirijo un curso de capacitación sobre cómo acabar con la violencia contra las mujeres, pero algunos de los participantes reaccionan de forma negativa. ¿Qué puedo hacer?
Respuesta: Cuando a la gente se le pide que cambie su mentalidad sobre la violencia y la desigualdad entre hombres y mujeres, es posible que se resista al cambio. Entre las maneras de resistirse, se incluyen negar o minimizar el problema, justificar el comportamiento o la actitud, culpar a la víctima, cambiar de tema o permanecer en silencio.
Si bien puede ser difícil enfrentar estas reacciones, también tienen su lado positivo porque brindan la oportunidad para el crecimiento y el aprendizaje. A continuación, sugerimos algunas maneras para responder a estas reacciones:
- Pida aclaraciones: identifique qué tipo de resistencia se está expresando. Puede hacer preguntas clarificadoras como: «Gracias por hacernos saber su opinión. ¿Puede decirnos por qué se siente así?».
- Pida otra opinión. Pregunte al grupo: «¿Qué piensan ustedes de este comentario/actitud?». Si nadie tiene otra opinión, dé una usted.
- Básese en los temas del programa de capacitación. Mencione una actividad relevante de la capacitación y pregunte: «¿Cómo cree que la gente empezó a pensar de esa manera? ¿Quién nos enseñó estas actitudes? ¿Cómo refuerzan esta idea algunos de los comportamientos dañinos que hemos discutido aquí?».
- Dé ejemplos de hechos que respalden un punto de vista diferente y destaque una perspectiva útil. Cite estadísticas o leyes pertinentes.
- Ofrezca hablar del tema de forma individual: si el participante sigue reaccionando de forma negativa, puede sugerirle reunirse con él de forma individual.
Es muy poco probable que la persona que opone resistencia en el grupo cambie abiertamente de opinión. Pero el facilitador habrá ofrecido un punto de vista diferente con el solo hecho de confrontarlo.
Envíenos sus problemas espinosos a la dirección que se indica más abajo.