Hace muchos años trabajé con un grupo para controlar grandes surcos causados por la erosión, los cuales a veces llegaban a medir hasta 10 metros de ancho. Enterramos postes de madera dura hasta un metro de profundidad dejando que la otra punta del poste quedara al mismo nivel que el nivel original del suelo. Los plantamos en dos filas de un lado del surco al otro y los atamos diagonalmente usando alambre. Llenamos el surco con paja o pasto y luego plantamos esquejes de sauce. A medida que el nivel de paja y pasto bajaba, lo íbamos llenando de nuevo.
Al cabo de dos años el suelo se había nivelado, los sauces estaban creciendo bien y la tierra nuevamente se podía sembrar.
Dr William Dobson, Tecuitata, Nayarit 63777, México.