Este estudio bíblico nos ayuda a pensar sobre cómo podemos vivir de manera responsable y dar un buen ejemplo a los que nos rodean.
Leamos Génesis 2: 4-25.
- ¿Qué provee Dios en beneficio de Adán?
- Qué responsabilidades entrega Dios a Adán?
- ¿Qué dice este pasaje sobre la manera en que Dios pretende que cuidemos del medio ambiente y de las personas que nos rodean?
Leamos Deuteronomio 23:12-14.
En este pasaje, Dios está hablando a los israelitas por medio de Moisés sobre la eliminación segura de excretas. Esta orden fue dada para mantener el campamento sagrado (versículo 14), pero la práctica también habría mantenido el campamento saludable. Las infecciones como la disentería, la diarrea, los parásitos intestinales, la fiebre tifoidea y la tiña son el resultado de malas prácticas de higiene, y éstas pueden prevenirse.
- ¿A qué grado nuestras prácticas sanitarias e higiene personal demuestran que cuidamos nuestra salud y la salud de nuestras familias y comunidades?
- ¿Qué acción podemos tomar para mostrar a otros cómo practicar buen saneamiento y buena higiene?
Los cristianos tienen el desafío de ser la sal y la luz del mundo (Mateo 5:13-16). Como seguidores de Cristo, debemos dar un buen ejemplo. Algunas personas han dicho que ‘de la pulcritud a la santidad, un paso’.
- ¿Hemos mantenido bien nuestros hogares? Estaría mal que nuestros hogares fueran criaderos de animales, como moscas y ratas, que portan enfermedades. Tendríamos que asumir la responsabilidad de la vida de nuestros vecinos si alguno de ellos adquiriera una enfermedad como resultado de la falta de higiene en nuestro medio ambiente.
El Reverendo Canon George Bagamuhunda es Ingeniero Hidráulico y trabaja como Coordinador de Programas para el Programa de Agua y Saneamiento para la Diócesis de Kigezi en Uganda. E-mail: [email protected]