Dr. Julian Eaton
Los líderes religiosos o espirituales suelen ser las primeras personas a las que la gente acude en momentos de crisis personales. Ellos pueden aportar sabiduría, promover la sanación y fomentar la reconciliación.
La gente tiende a buscar este tipo de apoyo si tiene una enfermedad, ya sea física o mental. En ambos casos, las personas buscan consuelo espiritual. No obstante, también deben ser derivadas a un profesional médico competente.
¿Qué es un problema de salud mental?
Los problemas de salud mental afectan las emociones, el estado anímico y el pensamiento o el comportamiento de una persona. Estos problemas son muy comunes. Alrededor de una de cada cuatro personas sufrirá un problema de salud mental en algún momento de su vida. Para la mayoría de las personas, se tratará de un breve período de depresión o ansiedad. En este caso, es muy útil hablar con los amigos o la familia, o con los líderes espirituales o comunitarios. Esto puede ayudar a resolver los problemas que están causando el sufrimiento.
Sin embargo, un número menor de personas puede sufrir una enfermedad mental más grave. Por ejemplo, su comportamiento puede ser muy extraño o sus pensamientos y sus discursos pueden resultar muy confusos. En este caso, es importante que vean a un profesional de la salud mental.
En muchos países, la gente tiene la noción equivocada respecto a que las enfermedades mentales graves son siempre provocadas por dificultades espirituales o incluso debido a una posesión demoníaca. Esto puede resultar en largos períodos de «tratamientos» en las iglesias, las mezquitas o los templos, o por parte de curanderos tradicionales. A veces, estos tratamientos se proporcionan sin el consentimiento de la persona, y es posible que impidan que esta busque la atención médica adecuada. En consecuencia, la enfermedad puede empeorar.
Es mucho más fácil recuperarnos de una enfermedad mental si se nos trata con compasión, si tenemos la posibilidad de decidir qué tratamiento vamos a recibir y si podemos ver a un especialista en salud mental si fuera necesario.