por Gilda Liane da Cruz.
‘Un niño abandonado proviene de una familia abandonada.’ Esta es la preocupación del Programa Comunitario de Reconciliación del Menor en São Paulo, Brazil. El programa se inició en 1986 como respuesta al colapso de la vida social en nuestro país. Comenzamos proveyendo un plato de sopa espesa a unos 30 niños y unas horas de cuidado por parte de voluntarios. Nos reunimos en un terreno perteneciente a la Iglesia Evangélica Luterana en Vila São Jose, un barrio en las afueras de la ciudad de São Paulo. Actualmente, cuidamos a unos 300 niños y adolescentes ofreciéndoles tres comidas al día, varias actividades y un amplio servicio educacional que cubre actividades pre-escolares y hasta cursos profesionales.
Existe una gran necesidad de apoyar a los niños necesitados de familias de escasos recursos al borde de la sociedad – ya que varios niños abandonados y de la calle provienen de estas familias. Nuestros empleados son principalmente las madres de los niños que están bajo nuestro cuidado y los adolescentes que pertenecieron a nuestro primer grupo.
Manufactura de papel
Esta actividad ocupa a unos 15 adolescentes que trabajan en equipo repartiendo las distintas tareas. Obtenemos sobras de papel de las imprentas, cartón de varios colores y usamos muchos periódicos en el proceso de secamiento.
Se colocan el papel y el cartón en baldes de agua. El color del cartón usado determina el color final del papel. Después de haberlo dejado en remojo durante varias horas, el material se licúa en una máquina. El resultado es una pasta líquida que se coloca dentro de un recipiente chato. Luego, se usa un colador cuadrado para juntar una capa fina de la pasta. En esta etapa, agregamos efectos especiales como ser un diseño o un mensaje. Se quita el agua sobrante de esta capa fina de pasta presionando sobre ella con trapos secos. Luego, se quita cuidadosamente la capa fina de la malla y se coloca entre hojas de periódico para que se seque. Pasamos un rodillo de madera sobre las hojas de diario para alisar el papel. Para la última etapa de secamiento se quita el diario y se deja el papel sobre una superficie lisa. Lo único que falta ahora es cortar los bordes y nos queda un producto atractivo y práctico hecho a mano para vender.
Programa Comunitário Reconciliação do Menor Rua Hilário Ascabusi 25 São Paulo -SP Brazil
Una vez que el proyecto empezó a crecer, iniciamos cursos con colaboradores tanto remunerados como voluntarios. Aprendí varias cosas, entre ellas: mecanografía, cocina, drama, danza y computación. Actualmente mi madre es parte del equipo de instructores y yo ayudo en el equipo de adolescentes. Hacemos deportes, tenemos grupos de apoyo escolar, carpintería y un taller para reciclar papel. La elaboración de tarjetas de promoción de papel reciclado ayuda a que el proyecto sea más conocido y me da la oportunidad de poder ganarme un pequeño ingreso. Espero que esto me ayude a conseguir un empleo y a tener la esperanza de un futuro mejor. Renata de Jesus Souza, 16