Esta es la administración forzada de preparaciones líquidas por la garganta del animal.
Se puede utilizar con todo tipo de ganado. Cuando se administra el líquido, la cabeza del animal debe estar levantada de manera que el líquido no entre a los pulmones. Se puede usar un tubo de bambú, una calabaza o botella (de vidrio o plástico) para tratar a los rumiantes y cerdos. Si se usa una botella debe ser dura para que no se rompa y hiera al animal. Para las gallinas utilizar una jeringa sin aguja, un gotario o una paja (de arroz, sorgo o plástico)