Cuando un grupo planea sus propósitos y actividades, es fácil ser positivo y asumir que todo irá bien. Sin embargo, muchas cosas pueden cambiar el resultado de las actividades planeadas. A menudo las cosas no resultan de acuerdo a lo planeado.
Al planear actividades, es muy útil considerar lo que puede inesperadamente cambiar y poner las actividades en riesgo. Por ejemplo, miembros claves podrían enfermarse o dejar el grupo; podría ocurrir un desastre natural; el Tesorero podría desaparecer con el dinero; otro grupo podría empezar a producir el mismo producto.
Una vez considerados los riesgos, el grupo estará mejor preparado para hacer frente a lo inesperado.
Discusión
Consideren nuevamente al grupo que quería mejorar el servicio de salud de su comunidad. Primero, consideren lo que asumen permanecerá sin cambiar. Por ejemplo:
• Asuman que la clínica permanecerá abierta
• Asuman que la comunidad tendrá acceso a fuentes de agua mejoradas
¿Pueden pensar en algo más?
¿Cuáles son los posibles riesgos que tendrían que enfrentar? Por ejemplo:
• El gobierno incrementa salarios en un 50%
• Podría haber una erupción de cólera o fiebre tifoidea
¿Pueden pensar en algo más?
Piensen en los supuestos y los riesgos para cada uno de los objetivos que ustedes han listado.
Repitan este ejercicio nuevamente con algunos otros objetivos imaginarios.