Ventajas y desafíos para la iglesia en el trabajo de incidencia
Un gran número de iglesias ya se encuentra realizando trabajo de incidencia, aunque a veces no lo conocen como tal. Para muchas personas, defender a las personas que viven en opresión o vulnerabilidad es algo natural. La iglesia puede desempeñar varios papeles estratégicos en el trabajo de incidencia:
- Los líderes de las iglesias pueden ejercer influencia en los demás
- Las iglesias pueden movilizar grandes números de personas para orar y actuar
- Las iglesias gozan de credibilidad en numerosos Gobiernos nacionales y pueden constituir una fuente de opinión confiable sobre cuestiones morales
- Las iglesias pueden vincularse a redes más amplias
Las congregaciones de iglesias locales ofrecen ventajas al trabajo de incidencia, como la recopilación de información local, la difusión de información en el ámbito de la comunidad y la habilidad para actuar como consolidadora de la paz.
Las estructuras eclesiales, como las denominaciones, también ofrecen ventajas particulares y son adecuadas para desempeñar papeles específicos. Por ejemplo, pueden amplificar los mensajes a través de los medios de comunicación, actuar como defensoras internacionales, representar las opiniones de las iglesias y colaborar en alianzas más amplias.
También existen desafíos para la iglesia a la hora de participar en el trabajo de incidencia:
- Las personas en el liderazgo de las iglesias pueden verse comprometidas políticamente
- Las iglesias pueden carecer de conocimientos especializados
- Las iglesias pueden carecer de capacidades con relación al personal, el tiempo y los recursos
- Las iglesias pueden ser vulnerables a la persecución estatal
- Algunas personas dentro del liderazgo de las iglesias pueden oponerse a la participación de sus entidades en el trabajo de incidencia citando su entendimiento teológico del papel de la iglesia en el mundo
- Las iglesias pueden carecer de unidad, tanto a nivel local como a nivel de la denominación
Incidencia en el contexto de la movilización de la iglesia y de la comunidad
Tearfund lleva más de 20 años implementando el proceso de movilización de la iglesia y de la comunidad en por lo menos 25 países. A través de este proceso, las iglesias inspiran y empoderan a los ciudadanos para que identifiquen las necesidades de sus comunidades y las aborden con sus propios recursos.
En algunos países, las iglesias socias de Tearfund han implementado la incidencia en el proceso de movilización de la iglesia y de la comunidad. Este enfoque se denomina «incidencia en el contexto de la movilización de la iglesia y de la comunidad».