En respuesta a estas estadísticas acerca del gasto y la rendición de cuentas del Gobierno nacional, la organización socia de Tearfund invitó a los caricaturistas de todo el país a crear dibujos sobre la falta de transparencia y de rendición de cuentas presupuestarias del Gobierno. Los dibujos debían respetar el contexto político delicado para que sus mensajes no fueran censurados antes de llegar al público destinatario. Esta forma creativa de difundir mensajes mediante caricaturas y otras publicaciones facilitó la difusión de la campaña acerca de la rendición de cuentas presupuestaria del Gobierno, creaó conciencia en la población sobre el tema y motivó la participación del público dentro del restrictivo espacio dado a la sociedad civil.
A medida que las caricaturas captaron la atención de los medios de comunicación y del público en general, la organización socia pudo reunirse con el Ministro de Finanzas nacional para promover la transparencia en el uso de los recursos e impulsar la justicia económica. Tanto las caricaturas como la reunión con el Ministro de Finanzas también abrieron la puerta para que la organización socia de Tearfund invitara a 60 funcionarios gubernamentales a una capacitación sobre proyectos de presupuesto ciudadano de otros países. Como resultado del aprendizaje extraído en esta capacitación, se desarrolló un proyecto nacional de presupuesto ciudadano. Este proyecto se guió por los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos. El proyecto de presupuesto ciudadano fue creado para aumentar la transparencia entre el Gobierno de la nación y los ciudadanos, lo que luego aumentaría la rendición de cuentas del Gobierno nacional sobre sus gastos.
Sin embargo, la difusión del proyecto de presupuesto ciudadano a los ciudadanos fue limitada. El Gobierno nacional no quería que las organizaciones de la sociedad civil estuvieran al frente de la difusión. En su lugar, el Gobierno quería hacerlo él mismo. Sin embargo, la organización socia de Tearfund desarrolló guías ilustradas con caricaturas para todos los ciudadanos —desde niños y niñas hasta miembros del parlamento— acerca de la rendición de cuentas, a fin de garantizar que cualquiera que viera el proyecto de presupuesto ciudadano lo entendiera.
Estos temas delicados fueron aceptados con más facilidad por el público en general y el Gobierno nacional cuando la organización socia de Tearfund utilizó los dibujos para comunicar sus actividades de incidencia. Esta estrategia de comunicación permitió que las cuestiones más apremiantes para la población, la rendición de cuentas y la transparencia gubernamentales, fueran entendidas con claridad por los funcionarios del Ministerio de Finanzas y los principales donantes internacionales. Las actividades de incidencia de la organización socia de Tearfund han influido de forma positiva en los niveles de rendición de cuentas social del Gobierno del país de Asia.