El tétanos en una enfermedad muy seria que hace que los músculos de una persona se contraigan y se vuelvan muy rígidos. Es muy difícil de tratar y más de la mitad de los adultos que contraen el tétanos muere.
El tétanos ocasiona más de la mitad de los casos de muerte de recién nacidos y más de 25% de la mortandad infantil en algunos países en desarrollo. La OMS estima que más o menos 750,000 recién nacidos mueren de tétanos cada año, aunque la mayoría de estas muertes no se informan.
El tétanos en los recién nacidos es causado por una infección cuando se corta el cordón con un instrumento sucio o cuando el bebé nace en condiciones antihigiénicas. Pocos días después de nacer, el bebé no puede mamar bien. A los pocos días la mayoría de bebés muere. En el número 8 de Paso a Paso se detallan maneras de prevenir esta enfermedad mediante buena higiene en el parto. En este número es importante mencionar la importancia vital de la inmunización de las madres gestantes antes de que den a luz.
Es sabido que las tres dosis de tétanos en la infancia (incluidas en la inyección DPT - la antitetánica, la antitosferínica y la antidiftérica) junto con dos inyecciones de revacunación - preferiblemente a los cinco y a los quince años - deberían dar protección completa de por vida.
Una madre que ha recibido las cinco dosis estará protegida. Sin embargo, a no ser que la madre tenga evidencia escrita de las cinco dosis, sería mejor suponer que no ha recibido ni una. Dos dosis de la vacuna aplicadas a la madre con un mes entre las dos en cualquier momento durante el embarazo, protegerá a la madre y al bebé del tétanos. Las dos dosis deben ser seguidas por tres dosis más con un mes entre las dosis. Es importante notar que no es peligroso dar dosis extras de la vacuna antitetánica si la madre no está segura si ha recibido la vacuna antes o no. Si hay duda es mejor dar la vacuna. Anime a las madres a que guarden las fichas de salud de sus hijas para que estén disponibles cuando las hijas lleguen a ser madres.