Medios de comunicación comunitarios

Desde 2017, un grupo comunitario de nombre Naway Saher (Nuevo Amanecer) del norte de Pakistán produce regularmente programas radiales que generan debates en torno a cuestiones de salud, higiene, inclusión social e infraestructura local. Estos programas participativos, producidos en el lugar, en el idioma local, son un ejemplo de medios de comunicación comunitarios.

Los medios de comunicación comunitarios deben distinguirse de una campaña de medios de comunicación. En general, las campañas suelen enfocarse en obtener resultados específicos en materia de salud o desarrollo, mientras que los medios comunitarios reúnen a la gente para escuchar, debatir y actuar con el objetivo de superar los problemas locales. También pueden crear un espacio para que las personas que se encuentran en situación de desventaja o que enfrentan injusticias puedan hacerse oír.

Hablar abiertamente

En Pakistán, un grupo de voluntarios de Naway Saher se enteraron de que varios miembros de la comunidad habían sido estafados.

El Gobierno había puesto en marcha un plan para que personas de muy bajos recursos económicos pudieran recibir atención de salud. Sin embargo, como estas personas tenían un bajo nivel de educación, muchas no entendieron cómo solicitar la ayuda y sus solicitudes fueron rechazadas.

Algunas personas se aprovecharon de esta situación. Les solicitaron a los interesados un pago para inscribirlos en el plan, pero, en su lugar, se quedaban con el dinero. Como resultado, muchas familias de bajos ingresos no solo perdieron dinero, sino que se quedaron sin recibir la ayuda que otorgaba el Gobierno.

Naway Saher emitió entrevistas con las familias damnificadas. Las personas que se habían robado el dinero escucharon el programa y se sintieron impulsadas a ponerse en contacto. Naway Saher organizó un evento en el que las personas devolvieron el dinero mal habido a sus respectivos dueños. A cambio, nadie tomaría otras medidas contra ellas.

Distintos modelos

Los medios de comunicación comunitarios abordan las cuestiones planteadas por los miembros de la comunidad y motivan a las personas a exponer sus ideas, esperanzas y preocupaciones. Durante los programas, se escuchan canciones y obras de teatro para ayudar a que las personas de distintas procedencias o con opiniones diferentes se entiendan mejor. En los programas en vivo, a veces se invita a los oyentes a enviar mensajes o llamar por teléfono a los presentadores para opinar al aire sobre algún asunto.

Los programas de Naway Saher se emiten por una emisora de radio comercial local que dispone de espacios comunitarios. Otros grupos comunitarios conducen sus propias emisoras de radio. En áreas donde no hay cobertura radial o cuando es muy costoso establecer una radio comunitaria, se trabaja con grabaciones de audio que se conocen como pódcast. Estas grabaciones se distribuyen en tarjetas de memoria entre grupos de oyentes (véase la página siguiente).

Un recurso para todos

Un elemento importante de los medios comunitarios es la forma en que las difusiones al aire, como los programas radiales, se vinculan con las actividades que no se transmiten de este modo, como eventos comunitarios y cursos de capacitación. Los contenidos de audio refuerzan e inspiran los eventos que no se difunden al aire, y viceversa: las actividades comunitarias inspiran y definen los contenidos que se difunden al aire.

En Kenia, por ejemplo, durante las elecciones, una emisora de radio comunitaria informó cómo se desarrollaba el proceso electoral y difundió testimonios de representantes de dos grupos históricamente enfrentados. Los oyentes manifestaron que esto había sido útil para entender lo que significa ser un integrante del otro grupo, y las elecciones transcurrieron de forma pacífica.

Todas las personas, cualquiera sea su origen, pueden aprender a participar en los medios de comunicación comunitarios. En toda comunidad o grupo, habrá gente que se destaca más en áreas técnicas y gente que es más creativa. Pero el requisito principal es que todas las personas estén abiertas a escuchar a los demás, reconocer sus fortalezas y respetar sus historias.