Se puede utilizar todo tipo de frutas blandas para hacer confituras. Si fuese posible, usar un libro de recetas de confituras que explicará exactamente cuánta fruta, azúcar y agua se debe usar para cada fruta. Sin embargo, si no se pueden encontrar recetas, se dan aquí los principios generales de la confección de confituras.
Usar frutas blandas que estén maduras, cortadas en cubitos, por ejemplo mango, grosellas, fresas y guava para hacer una buena confitura. Medir la fruta por tazas al ponerlas en una olla grande para cocerla. La confitura salpica bastante mientras se cuece, por lo que no conviene utilizar una olla muy pequeña.
Por cada dos tazas de fruta utilizar 1/4 de taza de agua (menos si la fruta es muy jugosa, como la piña, las grosellas o las fresas). Cocer la fruta hasta que esté bien blanda (por lo general, de 15 a 20 minutos). Luego agregar 1 taza de azúcar por cada dos tazas de fruta. Revolver bien y dejar que hierva entre 15 a 20 minutos hasta que esté a punto. Probar el punto dejando caer un poquito de confitura sobre un plato frío. Después de algunos minutos, tocarla con el dedo. Si se hacen arrugas y se forma una capa elástica, está lista. De no ser así, continuar hirviendo y luego hacerlo de nuevo. Puede ser necesario agregar más azúcar.
Tomar frascos para confitura muy limpios y secos. Antes de vertir la confitura en cada uno, envolver bien con un paño fresco y húmedo para evitar que se rompa el vidrio. Llenar y cubrir con una tapa limpia.
Acordarse de las proporciones – 2 tazas de fruta, 1 taza de azúcar, 1/4 de taza de agua. Recordar también que éste es un cálculo aproximado. Experimentar con la fruta que se tenga a mano. Las frutas blandas requieren menos cocción. Si no se pone a punto, utilizar menos agua y más azúcar. Si se pone como piedra, utilizar más agua. La confitura de piña es muy difícil de hacer y no se guarda muy bien (pero el sabor es excelente). Hacer pequeñas cantidades. Las naranjas, limones y otros cítricos necesitan una cocción mucho más larga y por cada dos tazas de fruta añadir 1/2 taza de agua y 11/2 taza de azúcar. Atar las semillas de los cítricos en un pedazo de tela de algodón y cocerlas con la confitura para mejorar el punto.