Muchas casas, particularmente en áreas urbanas, tienen poco espacio para cultivar cosechas o verduras. Sin embargo, fuera de prácticamente todas las casas hay un área de tierra desnuda. La tierra puede ser dura o infértil y la gente a menudo no considera usarla para cultivar verduras. Pero aquí hay una manera de utilizar este espacio sin uso para hacer una huerta diminuta.
El sistema funciona mejor si varias familias están de acuerdo en trabajar juntas y construyen una huerta por semana. La idea también puede ser útil en campamentos de refugiados.