Aproximadamente 2.600 millones de personas carecen de saneamiento seguro; esto es más de un tercio de la población mundial. La Meta 10 del Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) 7 es ‘Reducir a la mitad el porcentaje de personas que carecen de acceso al agua potable y al saneamiento para el 2015’. Esta es una meta ambiciosa, pero los ODM han sido importantes al darle un enfoque a los gobiernos y a las ONG sobre temas claves para el desarrollo. Habiendo transcurrido la mitad del plazo propuesto, el logro del elemento de saneamiento avanza demasiado lento en 74 países. ¡Con las actuales tasas de progreso no se espera lograr la meta en África subsahariana hasta por lo menos el año 2076! Es probable que esta falta de avance en saneamiento e higiene tenga un gran impacto sobre otras metas de los ODM como la mortalidad materna, el acceso a la educación y el afrontar enfermedades.
Investigaciones realizadas por el Overseas Development Institute y Tearfund, así como el Informe de Desarrollo Humano 2006 del PNUD, han intentado identificar las principales barreras para mejorar el saneamiento. Los mismos han sugerido algunos de los pasos requeridos si se desea progresar más rápidamente hacia la meta para el saneamiento de los ODM.
El saneamiento como prioridad Existe un cierto grado de tabú que rodea el saneamiento y la higiene, y es menos probable que los funcionarios gubernamentales hablen sobre este tema que, por ejemplo, sobre la necesidad de construir nuevas escuelas. Dado que raras veces existe un ministerio gubernamental general para el saneamiento, a menudo hay pocas políticas y estrategias de saneamiento, y cuando sí existen, a menudo son mal implementadas. Además, las comunidades tienden a no dar prioridad al saneamiento; quizás debido a una falta de educación sobre las consecuencias de un mal saneamiento, o porque las voces de las mujeres, quienes son las más afectadas por el mal saneamiento, no son escuchadas.
Vínculos con otros sectores Si bien la mayoría de las personas puede visualizar vínculos evidentes entre el saneamiento y el agua, no siempre las personas están conscientes de los vínculos entre el saneamiento y otros sectores. Es vital que los proyectos y los planes en sectores como la salud, la educación y el desarrollo rural y urbano incluyan esfuerzos por mejorar el saneamiento.
Capacidad A menudo hay una escasez de capacidad en el sector de saneamiento; esto involucra a los funcionarios gubernamentales locales, a los promotores de salud pública, y a los que diseñan y construyen letrinas apropiadas. Debe desarrollarse capacidad en todos los niveles, y esto requerirá de más financiamiento que el actualmente disponible.
Cambio de conducta Algunos proyectos de saneamiento no han tenido éxito debido a que han sido fundamentados sobre un mal entendimiento de lo que ejerce influencia sobre el cambio de conducta que es necesario para asegurar un buen saneamiento. Las investigaciones sugieren que el suministro de letrinas subsidiadas a menudo no da como resultado una mejoría en el saneamiento y la higiene. Por otra parte, la inversión en la movilización de la comunidad y en la educación ha producido mejores resultados. Esto ha motivado que las personas deseen tener letrinas y mejoren sus prácticas de higiene.
Limitaciones de los ODM
A pesar de que siempre es bueno tener un objetivo claro a la vista, debemos estar conscientes de las limitaciones de esta meta específica de los ODM de mejorar el acceso al saneamiento y a los suministros de agua. Tomemos en consideración, por ejemplo, lo siguiente:
Cobertura y calidad La meta de los ODM mide la cobertura (la proporción de hogares con acceso al saneamiento) sin embargo, no toma en cuenta la calidad de dichas instalaciones sanitarias. En las estadísticas de cobertura se incluyen ‘letrinas de pozo mejoradas’ dañadas o en mal funcionamiento, pero éstas presentan grandes riesgos de salud pública para las familias y las comunidades. Además, lo que quieren las personas a menudo es diferente a las tecnologías que suministran los gobiernos y las ONG, lo que lleva a la presencia de instalaciones sanitarias que no son utilizadas.
Integración del agua, el saneamiento y la higiene Es importante que la mejoría en el acceso al saneamiento sea acompañada por la higiene y la educación en salud. Sin embargo, la meta de los ODM no mide el aumento de los conocimientos y de las buenas prácticas relacionado con la higiene personal. El agua limpia, la eliminación segura de la excreta y la higiene personal son tres elementos claves de toda estrategia para mejorar la salud pública. Por lo tanto, deben permanecer integrados.
Asociaciones a nivel comunitario La meta de los ODM mide la mejora en saneamiento a nivel doméstico, pero no toma en cuenta la necesidad de un saneamiento a nivel comunitario. Aunque los programas de saneamiento exitosos dependen de los cambios en las prácticas a nivel doméstico, es poco probable que la salud pública se beneficie de la instalación de una letrina doméstica a menos que otros hogares también tengan letrinas. La instalación de una letrina en un hogar no ofrece protección en contra de la excreta de otros hogares que no tienen acceso a una letrina. Además, las intervenciones a nivel comunitario tienden a tener mayor éxito en provocar cambios de conducta perdurables y beneficios de salud medibles que las iniciativas dirigidas a hogares individuales. Esto se debe a que las comunidades que son educadas en conjunto tienden a actuar juntas y a crear una cultura de buen saneamiento. El Informe de Desarrollo Humano 2006 de la ONU sugiere que las intervenciones a nivel comunitario requieren de una asociación entre las comunidades y sus gobiernos locales que laboran bajo una estrategia de saneamiento nacional.
Asuntos ambientales Un saneamiento seguro no trata solamente sobre el aumento en la cobertura de letrinas. También tiene que ver con la protección del medio ambiente. Si las mejoras en el saneamiento no disminuyen la contaminación de un suministro de agua subterránea o de un suelo agrícola, o si el enfoque de saneamiento escogido da como resultado que el medio ambiente se vea expuesto a aguas residuales no tratadas, el riesgo de mala salud aumenta. Los enfoques al saneamiento deben salvaguardar el medio ambiente y sus limitados recursos naturales, como las fuentes de agua subterránea y las aguas superficiales.
Frank Greaves es el Asesor de Desarrollo de Programas para Agua y Saneamiento de Tearfund. E-mail: [email protected]
Laura Webster es la Asesora Principal en Políticas Públicas para Agua y Saneamiento de Tearfund.
E-mail: [email protected]