Cuando toda India quedó bajo confinamiento debido a la pandemia de Covid-19, Dipu* no pudo seguir vendiendo vegetales, y su esposa no pudo seguir trabajando como jornalera. Al no contar con suficiente dinero y no poder recibir visitas de familiares, se les hizo muy difícil mantener a sus dos hijos que viven con discapacidad y necesitan un alto nivel de atención de salud.
Por suerte, Dipu y su familia ahora están recibiendo el apoyo que necesitan, pero hay muchas otras historias como la suya. Para numerosas personas con discapacidad y sus familias, los brotes de enfermedades no solo las ponen en riesgo de contraer enfermedades graves, sino que también pueden causar estrés emocional y otras dificultades físicas.
Las personas con discapacidad pueden ser particularmente vulnerables si, además, se da lo siguiente:
- están malnutridas o tienen otros problemas de salud;
- tienen acceso limitado a servicios médicos y a otro tipo de apoyo por no contar con transporte o medios económicos;
- no tienen buen acceso a agua potable o a instalaciones de saneamiento, o no pueden asearse o cuidar de sí mismas por impedimentos físicos;
- tienen que tocar superficies que podrían estar contaminadas para su sostén físico o para obtener información sobre sus alrededores;
- tienen dificultad para acceder a información sobre salud pública, ya sea por problemas de audición o visión, o bien por no contar con la tecnología necesaria;
- son consideradas una carga por los miembros de sus familias que pueden sentir que es mejor dedicar su tiempo y recursos económicos limitados a atender las necesidades de otros familiares.
Formas de brindar apoyo
A continuación, sugerimos algunas formas de brindar apoyo a las personas que viven con discapacidad.
Preguntar qué necesitan
No debemos asumir que las personas con discapacidad no saben o no pueden explicar lo que necesitan. Tómese el tiempo de conocerlas a ellas y a sus familias, y de ser el caso, acordar juntos qué tipo de apoyo desearían recibir de su parte. Mantengan un diálogo continuo para asegurarse que siempre puedan decidir el tipo y el nivel de apoyo que reciben.
Noticias e información
Asegúrese de que tengan acceso a información clara acerca de cómo prevenir la enfermedad y evitar su propagación. Ayúdelas a determinar qué fuentes de información son confiables, como información provista por el Gobierno o los servicios de salud locales. De esta forma, podrán evitar el estrés que provoca leer o escuchar noticias falsas, confusas o engañosas.
Apoyo práctico
Durante el brote de una enfermedad, puede resultar más difícil acceder a agua, alimentos y medicamentos en las cantidades necesarias, en particular, cuando la población debe quedarse en casa. Ofrézcase a repartir alimentos o cualquier medicamento que haga falta. Si el puesto de recolección de agua está lejos de sus hogares, provéales suficiente agua de forma diaria para beber y mantener una buena higiene.
Apoyo emocional y espiritual
El aislamiento, la soledad y la ansiedad causados por el riesgo de contagio pueden agravar los problemas de salud mental de una persona u originar afecciones mentales nuevas. El cambio de rutina puede ser especialmente difícil para las personas que tienen dificultades de aprendizaje o con el manejo de las emociones. Hágales visitas frecuentes o bien busque otras formas de apoyarlas, como orar juntos o compartir versículos por teléfono.
Pida ayuda cuando sea necesario
Si le preocupa el estado de salud o el bienestar de una persona, póngase en contacto con su centro de salud local y pida asesoramiento.
*nombre cambiado