El animador necesita entender el modo en que la comunidad considera sus problemas. El siguiente ejercicio es muy fácil y ayuda a los participantes a apreciar que todos vemos e interpretamos las cosas de una manera diferente.
Haga sentar a cuatro voluntarios alrededor de una mesa y ponga sobre la mesa una hoja de papel con un número 3. Pregunte a los voluntarios qué pueden ver. Cada uno verá algo distinto – uno verá un número 3, otro la letra M, otro la W y el último la E. Luego se puede abrir una discusión usando las siguientes preguntas:
- ¿Qué está pasando?
- ¿Por qué es que cada persona ve algo distinto?
- ¿Cómo llega una persona a tener un punto de vista?
¿Podría pensar en alguna situación de la vida donde las personas ven la misma situación pero de distinta manera?
Cambios de actitud
¿Cómo influye en nuestra actitud lo que hacemos frente a los problemas? El siguiente es un ejercicio que ayuda a los participantes a identificar diferentes actitudes y a colocarlas en una escala que varía entre ‘no acción’ y ‘acción’ (ver recuadro).
Junto al grupo, piense en algunas frases imaginarias que reflejen precisamente los comentarios que hacen las personas de su comunidad. Aquí hay algunas para comenzar:
- Tenemos que morirnos en algun momento.
- Me gustaría llevar a los niños a la clínica pero queda muy lejos.
- Estoy consciente de que las vacas necesitan más forraje pero no tengo suficiente tierra.
- Las legumbres están muy caras en el mercado.
- Yo bebí esta agua y mi padre hizo lo mismo antes que yo y los dos hemos vivido largas vidas.
- Es demasiado trabajo para una mejora pequeña.
- Si todos nos pusiéramos a juntar piedras sólo tardaríamos dos días en tener lo que necesitamos.
- Podría dejar a mis hijos con una vecina para así poder ir a la clínica.
- Mis abuelos y mis padres siempre sembraban el maiz de esta forma.
- Los árboles que plantamos crecieron tan bien que nos alcanza para satisfacer nuestras necesidades y para vender un poco de madera.
Escriba estos y otros comentarios que usted pueda inventar en pedazos de papel. Lea algunos ejemplos en voz alta y juntos decidan qué etapa iría mejor con qué comentario. Divida los comentarios que quedan entre los participantes y deje que ellos mismos los asocien con las etapas apropiadas (ver recuadro).
Una vez que no queden más comentarios, léalos para verificar que todos hayan sido asociados correctamente. (A veces es difícil decidir a cuál etapa pertenecen – no pierda mucho tiempo decidiendo entre etapas que estén muy cerca una de la otra).
Durante la discusión, pregunte:
- ¿Cuáles de las afirmaciones demuestran que las personas no están dispuestas a hacer nada?
- ¿Cuáles de las afirmaciones demuestran que las personas están dispuestas a hacer algo?
- ¿En cuál de los extremos de la escala cae la mayoría de los comentarios? ¿Por qué?
- ¿Cómo el comprender mejor las actitudes de las personas, nos puede ayudar a planificar una capacitación más apropiada?
Adaptado del The Facilitators Resource Manual Part II – Skills for the Trainer – por Uganda CBHCA, PO Box 325, Entebbe, Uganda.