Para los trabajadores de la salud o del desarrollo, cada día puede traer muchos problemas y preocupaciones que necesitan atención inmediata. Sin embargo es fácil permitir que estos problemas inmediatos dominen toda planificación a largo plazo. Todos necesitamos definir prioridades en nuestras vidas y en nuestro trabajo e intentar asegurarnos de que éstos realmente ‘asuman la prioridad’ y absorban la mayoría de nuestro tiempo. De otro modo miraremos hacia atrás al año pasado y comprenderemos que no hemos ayudado a lograr ningún beneficio práctico y a largo plazo.
Las interrupciones comunes que toman nuestro tiempo y atención puede incluir:
- leer el periódico
- visitantes que necesitan hospitalidad
- amigos y parientes que necesitan ayuda con transporte
- funcionarios que piden ayuda para su trabajo
- falta de combustible para hacer visitas planeadas
- perder documentos o cartas importantes.
En lugar de siempre enfrentar lo inmediato, todos necesitamos asegurarnos de que también tenemos una visión a largo plazo y que le damos nuestra completa atención. Más abajo hay algunas ideas para una reunión que puede ayudar a los participantes a aprender cómo establecer prioridades eficazmente.
Una vez que la gente haya probado estos ejercicios y se haya familiarizado con la idea de establecer prioridades, estas habilidades pueden usarse en cualquier situación. El registrar la información es importante para planear. La gente puede listar los problemas o preocupaciones de otras personas con las que trabaja, o de su organización, clínica o escuela, por sí solos o en parejas y combinarlos en un gráfico, como el de más abajo. La gente podría indicar entonces cuáles son las preocupaciones prioritarias. En este ejemplo se pidió a 25 personas que priorizaran entre tres problemas locales en términos de cuán comunes y serios eran.