por Vannesa Lovera Hidalgo.
La Asociación San Lucas trabaja para desarrollar las comunidades proporcionando capacitación en planeamiento y habilidades de negociación y animando el trabajo en redes con el gobierno local y otras organizaciones.
Hemos trabajado con tres comunidades: Las Palmeras, Nuevo Milagro y Guillermo en la Región de San Martín en el Perú. Estas comunidades, como muchas otras, tenían problemas porque a sus líderes les faltaba la confianza, habilidades y capacidad. Eran incapaces de ponerse en acción en defensoría de derechos y promoción del desarrollo. Había también una necesidad de mejorar las relaciones con el gobierno local y otras organizaciones.
La Asociación San Lucas, junto con el concejo del pueblo, organizó capacitación en derechos humanos, participación de la comunidad y desarrollo rural. Trabajamos para fortalecer los programas de desarrollo existentes y hacerlos más sostenibles. Animamos a las comunidades para que participen en forma total en la planificación, ayudándolos a que prioricen sus necesidades, se pongan de acuerdo en posibles soluciones y establezcan metas. Otras organizaciones también se unieron en este trabajo que ayudó a desarrollar relaciones positivas.
La Asociación San Lucas cree que todos los esfuerzos de capacitación deben acompañarse con acción. Las comunidades tomaron parte en el proceso de presupuesto municipal para asegurarse de que sus prioridades fueran incluidas. Los miembros de la comunidad dedicaron días de trabajo para recoger información, identificar ideas y planificar proyectos.
Una vez que la fase de planificación hubo terminado, las tres comunidades y la Asociación San Lucas monitorearon el resultado de su trabajo. Todos apreciamos el valor de este trabajo en redes y la responsabilidad requerida. Fortalece el liderazgo local y también ayuda a integrar la sostenibilidad a los procesos de la comunidad. Los líderes de la comunidad están ahora más seguros de sí mismos, han mejorado la unidad y confianza, están mejor organizados y son capaces de manejar los proyectos existentes y los nuevos. Ellos pueden identificar sus propias responsabilidades y pueden resolver cualquier conflicto que pudiera suscitarse en la comunidad.
He aquí algunas de las lecciones aprendidas:
- Aprendimos la importancia de valorar el conocimiento de la gente de la localidad y de desarrollar el conocimiento de la comunidad.
- Aprendimos que las situaciones complejas nos obligan a ser creativos y a pensar en nuevas maneras de hacer las cosas.
- Aprendimos a construir relaciones más estrechas con la gente, entendiendo su forma de pensar y sus temores.
- Aprendimos a trabajar mejor juntos, a aceptarnos con nuestras diferencias, y a superar las dificultades dentro de la Asociación San Lucas.
- Aprendimos a creer que algo puede cambiar, por más grandes que puedan parecer los problemas. Damos gracias a Dios por ayudarnos a superar las barreras. Continuamos confiando en su ayuda mientras tratamos de extender su Reino de vida abundante, paz, amor y justicia.
La enfermera Vannesa Lovera Hidalgo es Directora de Desarrollo de la Comunidad en la Asociación San Lucas, Apdo 2, Moyobamba, San Martín, Perú. E-mail: [email protected]
Estudio de caso: Aprender a trabajar juntos
Luis Llamo Torres es un representante de la comunidad ante el gobierno municipal de Las Palmeras. Dice que antes de que la Asociación San Lucas empezara a trabajar en su comunidad, ellos eran incapaces de recibir algún apoyo del gobierno. Discutían mucho y no sabían trabajar juntos. Luis dice, ‘Ahora sabemos que tenemos el derecho para pedirle información a la municipalidad, y ellos tienen que dárnosla. La gente de la localidad ha aprendido que si no trabajamos juntos no habrá ningún progreso en Las Palmeras. Ahora cuando hay un problema nos reunimos y hablamos sobre él.' Su comunidad tiene ahora apoyo gubernamental para su proyecto de agua.