En esta edición de Paso a Paso se nos recuerda que las discapacidades son causadas, principalmente, por barreras en la sociedad y no por deficiencias físicas, intelectuales o emocionales específicas.
Estas barreras pueden ser bastante obvias, como, por ejemplo, un edificio al que puede accederse únicamente por escalones. Sin embargo, el mayor problema es la actitud de la gente, y muchas personas con discapacidad deben enfrentar a diario la ignorancia y la discriminación.
Si logramos identificar y derribar estas barreras, nuestras iglesias y comunidades serán más dinámicas, diversas e inclusivas. Todas las personas tendrán acceso a los servicios básicos como agua y saneamiento y nadie quedará atrás durante los desastres. Las personas con una discapacidad no visible, como la depresión, se sentirán valoradas y comprendidas.