En las montañas nepalesas de Putha Uttarganga, la mayoría de las personas trabajan una agricultura de subsistencia. El maíz es el principal cultivo, seguido de la papa, el trigo y los frijoles. Sin embargo, muy pocas personas tienen suficiente para alimentarse durante todo el año, y casi una quinta parte de la población tiene para comer durante más de seis meses al año.
Dado que la producción de maíz es estacional, los agricultores deben poder almacenarlo de forma segura y eficiente para que dure el mayor tiempo posible.
Secado
Es fundamental que, antes de su almacenamiento, el grano esté bien seco. Esto reduce el riesgo de que los insectos lo dañen o de contaminación por aflatoxinas, sustancias tóxicas producidas por hongos, que pueden provocar problemas de salud serios tanto en las personas como en el ganado.
Los cultivos deben secarse directamente al sol o en un lugar bien ventilado que esté protegido de la humedad y las inundaciones. Para evitar la contaminación, los granos no deben estar en contacto con el suelo. Por ejemplo, pueden secarse en esteras de bambú o en estructuras elevadas, como estantes de secado, o colgados del techo.
En Putha Uttarganga, el maíz recién cosechado se cuelga en estantes de madera o se coloca en los techos para que se seque al sol y al viento durante varios días antes de almacenarlo.