Posición acostada
Mientras está aprendiendo a amamantar o cuando experimenta problemas, esta postura puede permitir un buen agarre.
Recuéstese boca arriba, con la cabeza apoyada sobre una almohada a no más de 45 grados y coloque al bebé sobre su pecho. El bebé estará estable y no hará falta sostenerlo. Deje que el bebé siga su instinto natural y gatee hasta el pecho para un buen agarre. Asegúrese de que el bebé esté en estrecho contacto, piel con piel. Cruce un brazo por encima del bebé cuando este se haya acomodado en el pecho.
Posición de cuna
Esta es la postura más común después de la etapa inicial de aprendizaje. Coloque al bebé atravesado sobre su regazo, barriga con barriga y la cabeza apoyada en su antebrazo. Si el bebé está en el recodo de su brazo, estará muy alto. Sujete la espalda del bebé con la mano y antebrazo y acérquelo a usted. Si desea, con la otra mano, sostenga el seno desde abajo.
Acostada de lado
Esta es una buena posición para la noche. Recuéstese de lado con el bebé de frente a usted y colóquelo cerca de su cuerpo. Apoye la espalda del bebé en su mano o en una manta o toalla enrollada para que no gire sobre su espalda. Si está recostada sobre una cama, asegúrese de que el bebé no se caiga. El bebé tiene que poder mover la cabeza y extenderse ligeramente hacia atrás en dirección al seno.
Posición invertida
Esta es una buena posición si ha tenido una cesárea, cuando los senos son muy grandes o cuando está amamantando a más de un bebé al mismo tiempo (por ejemplo, a mellizos). Como se muestra en la imagen a la izquierda, coloque un almohadón sobre su regazo y sostenga al bebé sobre el antebrazo, con las piernas hacia atrás por debajo del brazo. Lleve al bebé hacia usted y sostenga la espalda y cuello con la mano que lo sujeta. Si es necesario, use la otra mano para sostener el seno.