A pesar de los rápidos avances tecnológicos, millones de personas no tienen electricidad en sus hogares, las escuelas, los centros de salud o las empresas.
Además, casi la mitad de la población mundial depende de la madera, el carbón o los residuos de cultivo para cocinar y calentar sus hogares. Esto expone a las personas a inhalar humos tóxicos que pueden provocar muchas enfermedades graves.
En esta edición de Paso a Paso, exploramos cómo la energía sostenible puede mejorar los ingresos, la salud, la seguridad, la educación y la vida diaria de las personas. En particular, demostramos que las soluciones de energía renovable a pequeña escala pueden ser más económicas, más confiables, más rápidas de instalar y menos contaminantes que extender una red eléctrica centralizada.